Cuando llega el momento de elegir puertas interiores para una vivienda, debemos tener en cuenta varios factores. Los más importantes son los siguientes:
- La funcionalidad de la puerta: saber si se va a utilizar en espacios húmedos, como baños o cocinas, en habitaciones o si hablamos de la puerta de entrada al domicilio.
- También es importante conocer el presupuesto del que disponemos ya que los costes pueden variar mucho en función del material de la puerta. Por ejemplo, el coste no es el mismo para una puerta de PVC que para una puerta de madera natural.
- Por último, no podemos olvidarnos del interiorismo. Tenemos que escoger un estilo acorde con el diseño del espacio.
Una vez resueltos estos puntos, podremos elegir entre distintos estilos de puertas.
Puertas de interior ideales:
1. Según material de la puerta
Puertas de madera: Son las más populares y aportan calidez y calidad a los espacios. Además, la madera es un aislante térmico y acústico, hecho que nos permite ahorrar energía y reducir la contaminación acústica de nuestra vivienda.
Fabricar puertas con este material conlleva un uso de energía mucho más reducido que otras opciones y te permite elegir gran variedad de tonalidades: roble, pino, nogal, cerezo…
Puertas de cristal: Permiten distintas variaciones. Transparente, esmerilado, teñido o decorado. Ideales para permitir la entrada de luz natural y crear sensación de amplitud. Se utilizan mucho en oficinas, salones, cocinas o para separar ambientes.
Sistema IDA de Centroalum
Puertas de aluminio: Son muy resistentes y duraderas. Hasta no hace mucho se focalizaban en entornos comerciales e industriales, pero en los últimos años han empezado a utilizarse en viviendas modernas de estilo industrial. Si lo que buscas es un estilo más discreto, hay la posibilidad de pintarlas o laminarlas.
Puertas de PVC: Se trata de un material duradero, resistente y bastante económico. Al necesitar poco mantenimiento, ser resistentes a la humedad y aislantes, las hace ideales para baños, cocinas y espacios húmedos.
2. Según tipología de la puerta
Puertas correderas: Hablamos de la solución al ahorro de espacio por excelencia. Si el espacio del que disponemos es reducido, las puertas correderas son la manera para no obstruir el área de paso. Además, podemos utilizar un sistema monitorizado. Otra opción, son las puertas correderas empotradas, para un acabado más limpio y minimalista. Algunas incluso están equipadas con sellos para reducir el paso de ruido.
Puertas semi abatibles: Son una solución poco usada y muy concreta. Estas puertas, combinan la forma tradicional de abertura abatible con puerta corredera. Ideales para espacios muy reducidos, ya que permiten desplegar solo media puerta al quedar la otra mitad dentro de la pared, de forma corredera.
Puertas pivotantes: Una opción elegante y sofisticada para agregar estilo y funcionalidad a cualquier espacio. Estas puertas se caracterizan por su pivote central, que permite que la puerta gire suavemente en ambos sentidos.
Además de su estética impresionante, estas puertas también proporcionan una apertura más amplia, lo que facilita el paso de objetos grandes o la movilidad de personas con necesidades especiales.
¿Qué puerta elegir en función del diseño y del estilo de un hogar?
Como hemos comentado al inicio, uno de los puntos principales a tener en cuenta a la hora de elegir una puerta, es el diseño interior del espacio.
Por ejemplo, si se trata de un estilo rústico, podemos elegir una puerta de madera de roble, pino o nogal con detalles naturales como vetas o nudos visibles. También podemos utilizar técnicas de acabados envejecidos como el decapado o el craquelado y añadirle un toque final con tiradores y bisagras de hierro forjado. Podemos destacar las puertas de granero, puertas correderas con guías y rieles de hierro, que le dan un toque auténtico al espacio.
Hay una pequeña diferencia entre rústico y clásico y es que, en este último caso, podemos usar puertas de madera con detalles de vetas, pero añadiendo terminaciones decorativas como manijas y cerraduras acabados en latón o bronce.
Si, por el contrario, buscamos una decoración minimalista, la mejor opción son las puertas enrasadas, o con marco oculto y las puertas paneladas para conseguir así una sensación de continuidad.
Elegir la puerta adecuada para cada espacio es crucial para lograr un equilibrio entre funcionalidad y diseño, creando un espacio armonioso y agradable estéticamente.
Si ha llegado la hora de hacer una reforma en tu hogar o estás pensando en hacerte una casa, te dejamos este artículo con las tendencias más it del momento.
