Muchas de nuestra obras tratan de reformas y rehabilitaciones. En ellas encontramos todo tipo de elementos constructivos tradicionales, como la “volta catalana” o bóveda. Para saber cómo actuar frente a la conservación de dichos elementos, hace falta conocerlos.
¿Qué es la “volta catalana” o bóveda?
La “volta catalana” o bóveda de ladrillo plano es una técnica de construcción tradicional catalana, que consiste en cubrir un espacio mediante la colocación de diferentes capas de ladrillos planos, en forma abovedada.
Quizás tenemos interiorizado que las bóvedas las encontramos en edificios de carácter señorial, como iglesias o masías. Pero lo cierto, es que resulta ser un sistema constructivo perfeccionado en la época industrial, que podemos encontrar en viviendas más humildes.
Existen diferentes tipos de bóvedas según su forma y manera de trabajar estructuralmente hablando; de pañuelo, de cañón, bóveda tabicada, escaleras, …
¿Cómo se construye una bóveda?
Las bóvedas pueden ser decorativas, a modo de falso techo, o estructurales. Las estructurales suelen ser, o bien tabicadas o rigidizadas con tierra compactada.
Dependiendo del tipo de bóveda que se construya, se usará una cimbra que se irá corriendo a medida que avance la obra. En el caso de la bóveda de pañuelo y la escalera, no es necesario su uso.
En las reformas y rehabilitaciones que realizamos, combinamos diferentes materiales, luces y acabados que permiten aportar otro carácter al espacio. De ese modo, mantenemos la esencia del espacio, sacándole el máximo partido.