En nuestro día a día existe la necesidad de iluminar los espacios que habitamos, es decir, de iluminar las actividades que desarrollamos en el interior de los edificios. Forma parte del proceso arquitectónico, diseñar la iluminación de éstos, ya sea de forma natural o artificial.
En muchas ocasiones, el tipo de iluminación viene sugerido según las características del entorno. No es lo mismo pensar la iluminación de una casa aislada, donde puedes generar ventanas dónde quieras, que iluminar, por ejemplo, una casa entre medianeras.
Así, el entorno puede sugerir pero no tiene que condicionarnos ni hacernos renunciar a la entrada de luz natural en todos los espacios. Por eso, el recurso utilizado en muchos casos es la luz cenital.
En nuestra última entrada en el blog, os hablábamos de la tipología de casa inglesa. Es precisamente, en este tipo de viviendas donde se puede conocer bien el concepto de luz cenital y la importancia de ésta .
La luz cenital en arquitectura
Se entiende, entonces, como luz cenital aquella que entra desde la cubierta. Es también aquella que todos relacionamos, con el elemento más inmediato, el lucernario.
La luz cenital, entonces, es aquella que nos llega desde el techo.
Como muestran las imágenes, el tipo de ventana que permite la entrada de luz cenital y la ventilación, son las conocidas como Velux.
Este tipo de luz permite iluminar espacios dónde es imposible tener una ventana que de directamente al exterior, también permite iluminar espacios donde los requisitos de iluminación se basan en calidad y cantidad.
Es decir, muchas veces, ante la posibilidad de iluminar a través de una ventana convencional, se elige iluminar mediante luz cenital ya que ésta crea un ambiente de confort y calidez.
Este tipo de entrada de luz desde el techo, también puede producirse en cubiertas intermedias como son los patios y terrazas dónde debajo de ellas existe un espacio con dificultades de iluminación.
En estos casos, se emplean lucernarios que pueden ser abatibles o no, en función de si se precisa combinar la iluminación con la ventilación.
La luz cenital permite tener un contacto directo con el exterior, siempre discretamente y generando intimidad, sin mostrar el interior de la vivienda directamente a la calle, del modo que lo hace una ventana convencional.
Otro tipo de luz cenital distinta a la de las plantas bajo-cubierta, es aquella que se puede llevar hasta la planta baja de la vivienda mediante un pozo de luz, es decir, mediante un patio interior.
Estos patios interiores, actúan como conductores de luz natural a todas las estancias situadas en las zonas más oscuras y difíciles de iluminar según la tipología de vivienda.
De este modo, no solo se ilumina la planta inmediatamente inferior a la cubierta sino que, la luz captada en la cubierta de la vivienda se distribuye y llega a la planta baja.
La iluminación cenital es un recurso a utilizar según las características del proyecto y según el diseño de los espacios interiores.
Cada espacio interior debe estar adaptado a la manera de vivir-habitar en él, por eso, el tipo de iluminación permitirá desarrollar las actividades del día a día del usuario.